Dicen que antes de hacer una foto debes pasearte por el lugar con la mirada atenta. Este es quizá el momento que más me interesa de la fotografía de naturaleza: estar allí con atención y concentración. Mirar, observar y sentir. Ayer a primera hora en aquel escenario tan poéticamente verde sentí una vez más, el privilegio y la alegría de estar viva.
Luego llega el momento de llevarte en una imagen esas sensaciones de quietud, de profundidad, de misterio y de vida, o del misterio de la vida.
Del misterio y de la fragilidad de la vida.
Taller de Costa y Bosque de Nieblas con Antonio Atienza Forte buenísimo fotógrafo y entrañable amigo